Novela laliter. Capítulo 67

Cap.67:

Cuenta Lali:

Me desperté y me encontré sola en la habitación. Esperaba ver a Peter durmiendo a mi lado, pero no estaba. Miré el reloj, marcaban las 9.30. De repente se abrió la puerta y apareció Peter todo transpirado vestido con ropa deportiva. En sus manos llevaba una bandeja con un desayuno. Me lo quedé mirando.

-Buen día, hermosa. Te traje el desayuno y come todo que tenes que alimentar al bebé- me dijo dándome la bandeja- Ah y ya saqué turno para que después del entrenamiento vayamos a hacerte la ecografía, y seguramente ya nos dicen si es nena o nene.

Lo miré y me reí.

-¿De qué te reís?- me preguntó

-Me causa gracia, estás re acelerado- le dije- ¿De dónde venís?

-Fui a correr con dos de los chicos que están en el equipo- me respondió- Ah volviendo a lo anterior, también pensé nombres. Si es varón me gustaría que se llame Bautista y si es mujer le podemos poner Margarita.

-Bautista Lanzani suena lindo, me gusta- le dije- Y si es mujer nos va a odiar, amor. ¿Margarita? Es nombre de otra época.

-Bueno, pero si es varón se va a llamar Bautista eh- me aclaró acercándose y tirándose sobre mí para darme un beso

-Salí Peter- lo frené- Estás todo transpirado.

-Está bien, me voy a bañar- me dijo y me robó un pico

-¿Desayunaste vos?- le pregunté

-Si si- me respondió entrando al baño

Cuenta Peter:

Hoy no tenía partido pero después de almorzar había entrenamiento. Comimos con mis compañeros de equipo, Lali se sentó a mi lado.

Cuenta Lali:

Mientras Peter entrenaba me fui a caminar por ahí. Era una hermosa ciudad. Después de dar un par de vueltas volví y esperé a que él termine. Nos tomamos un taxi hasta el lugar e ingresamos al consultorio, era la primera ecografía que me hacía. Me acosté en la camilla, estaba un poquito nerviosa, lo miré a Peter y le agarré la mano. Me levanté la remera y me colocaron un gel en la panza. Luego me pasaron las ondas abdominales y se empezó a proyectar en el monitor. Las imágenes eran bastante claras, ya que el bebé se encontraba bien de frente. Nos confirmaron que estábamos esperando una nena. Con Peter nos miramos y nos sonreímos.

Cuenta Peter:

Llegamos al hotel y se hizo de noche. Fuimos a cenar por ahí y luego volvimos a la habitación. Ambos nos sentíamos un poco raros, ya que todo era nuevo para nosotros. Me encontraba acostado en la cama mientras Lali estaba en el baño. Me sentía feliz pero me preocupaba ser padre a los dieciocho años. No sé si me sentía preparado para enfrentar esta etapa, era todo una responsabilidad y varias cosas de mi vida iban a cambiar. Tenía muchas ganas de tener a esa nena en mis brazos pero al mismo tiempo me daba miedo. Miedo de no poder darle todo lo que necesita, miedo de no ser un buen padre, miedo de fallar.

Cuenta Lali:

Salí del baño y lo noté pensativo. Me encontraba un poco sensible y movilizada por todo esto que nos estaba pasando. Su mirada se encontraba perdida en el techo. Me acerqué y me acosté apoyando mi cabeza en su pecho. Él pasó su brazo por mi alrededor.

-¿En qué pensabas?- me interesé

-No, en nada- mintió

-¿Tenes miedo?- le pregunté- Porque yo sí- agregué inclinando la cabeza para mirarlo

Suspiró y me acarició el pelo con su mano izquierda

-Un poco asustado estoy- me confesó- Pero es normal, supongo.

-Yo no quiero que nuestra hija sienta que fue un error ni quiero que te quedes conmigo solo porque estoy embarazada- le dije al mismo instante que se me caía una lágrima

-Ey, no- me dijo sentándose enfrentado a mi y secándome la mejilla- Yo estoy con vos porque te amo y porque sos el amor de mi vida. Y nuestra hija no va a ser un error, ella es fruto de nuestro amor. Siempre quise que seas la madre de mis hijos, tal vez sí, era algo que proyectaba para el futuro y no para ahora, pero yo estoy feliz y sé que vamos a ser buenos padres y la vamos a amar.

-¿Estaremos preparados?- le pregunté

-No lo sé- me respondió- Pero vamos a aprender a ser padres juntos.

-Te amo- le dije y lo abracé

-Yo mucho más, mi amor- me respondió- A las dos.

-No le vas a poder poner Bautista ahora- le dije y me reí

-Ya vamos a tener un nene y se va a llamar así- me respondió y sonrío- ¿Cómo queres que se llame esta nena?-agregó apoyando su mano en mi panza

-Ángela- respondí después de quedarme unos segundos pensando

-Se va a llamar así, entonces- me dijo- Y por el tamaño de tu panza intuyo que va a ser chiquita como vos- agregó sacándome una sonrisa

Peter se quedó dormido y yo tardé un poco más en conciliar el sueño. Me quedé pensando en todo, en la ecografía, en nuestra conversación, en nuestra hija. Tenía un poco de miedo pero me sentía muy feliz y sabía que a Ángela Lanzani amor no le iba a faltar. 

Importante! Cada vez más cerca del final. Gracias a todas las personas que leen la nove y por las que se toman unos minutos para dejarme un comentario. Buena semana para todas. Gracias por las 80.159 visitas. ¡Hasta el próximo capítulo!

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